jueves

La historia de mi parto...

Hola a todos!!
Hoy vuelvo a retomar el blog, después de más de mes y medio, así que imagino que intuiréis que ya dí a luz.
El motivo de que no haya escrito,(bueno hay mas de un motivo, por que Alba no me deja mucho tiempo para mí), es que estaba esperando poder hablaros de mi parto sin que me hiciese daño, y poder contarlo de una manera objetiva, dejando de lado mi parecer, y mi visión.
Os empezaré contando que me puse de parto la madrugada del domingo, a las 4 de la mañana del domingo 11 de septiembre, mientras dormía me despertaron unos dolores regulares cada 10 minutos, que no subían de intensidad, eran soportables pero si molestos, así siguió toda la madrugada, y mientras me dedicaba a andar por toda la casa y recorrerme el pasillo una y otra vez con las ganas de que todo fuese más rápido.
A las 10 de la mañana decidimos irnos al hospital, aunque los dolores eran exactamente igual que al principio y cada 10 minutos. Nos arreglamos y nos vamos a las 11.00 de la mañana.

Una vez allí, me hacen una revisión, tacto. Y suenan las palabras mágicas: "Estas de parto, cuello borrado y 4 centímetros de dilatación".Que alegría!!, aun se me ponen los pelos de punta al recordar ese momento, sabiendo que ya de allí no saldríamos solos, si no con Alba.
Así que camisón de hospital, fuera ropa, ingreso y a sala de dilatación.

La habitación es para mí sola, y como los dolores son muy soportables y apenas duelen, estoy comodísima. Llega la matrona que va a atender mi parto, asunción, de apariencia seria, pero un encanto. Me hace un tacto: 5 centímetros, esto va muy rápido. Me monitoriza y me recomienda que este un rato tumbada en la cama, aunque yo la pido que me deje andar en cuanto pueda, para así dilatar más rápido.
Mi matrona se sorprende incluso de la rapidez de dilatación, sin oxitocina, y siendo primeriza.
A continuación llega y me pone un poco de oxitocina, para ayudarme a dilatar y que todo sea mas rápido... ahora pienso que quizás no hacia demasiada falta, ya que yo llevaba buen ritmo de dilatación, y podría haber usado otro método más natural como la famosa pelota hinchable que había en todas las salas cuando dábamos las clases de preparación al parto...(¿en todas?..en la mía no...), pero bueno, me dejo poner el bicho ese, y ahora si que los dolores son algo mas fuertes, y mas para soportar en la cama sin moverse.
Al rato vuelve la matrona y me dice que si quiero andar...¿andar? quiero correr!!..
Me recorría el pasillo, una y otra vez, una y otra vez, contracción, paramos, andamos y andamos, contracción, paramos...y así era mucho mas llevadero...
He de reconocer que no se si tuve suerte, o mi cuerpo reaccionó bien, pero las contracciones no eran mas dolorosas que un pinchazo pequeño en el riñón y una presión, pero muy soportable.
Así que mientras andaba, hablaba por el móvil, me conectaba a redes sociales, comentaba, andaba, dolía y me paraba, y seguía hablando...y así hasta que la matrona salió a buscarme, para hacerme un nuevo tacto.
7 centímetros. Esto va muy rápido. La matrona incluso me recomienda que no me ponga la epidural, que todo va de maravilla. Yo le digo que si tengo tiempo para pensarlo, y me dice que el anestesista esta cerca que si quiere viene a hablar conmigo y acepto...(y pensar que dudé si ponérmela...que horror!).
Me rompe la bolsa manualmente, para acelerar el último tiron, y me sube la oxitocina. A continuación entra el anestesista y le digo que quiero la epidural.
Decir que no duele, o será que te meten tanto miedo con que no te muevas que a mi no me dolía ni siquiera las contracciones. Es desagradable, eso si, por que notas como entra la aguja, y como te toquetean por ahí dentro. Una vez puesta, empezó el hormigueo en las piernas, como cuando se quedan dormidas, pero yo si podía moverlas de momento...luego, mas tarde, ya no.
A las 21.00 horas, tengo unas ganas terribles de empujar, llamamos a la matrona, nuevo tacto y "por fin dilatación completa"...así que me recomienda que empuje, todo lo que quiera, y que mi chico vaya mirando no vaya a ser que nazca allí...
Así que a empujar se dijo, y vaya que si empujaba..en las contracciones, y cuando no tocaba..yo solo quería parir.
En uno de los pujos, acompañada de otra matrona que me metía caña diciéndome que no lo hacia bien, la niña coronó, y se le veía el pelito. Recuerdo a mi chico diciéndome "es morena"...y de nuevo me entró un subidon que me hacía tener mas ganas de empujar y que saliese ya.
A partir de ahí, entre pujo y pujo...entraba la primera matrona con una residente, y hacían tactos, y comentaban...aunque yo, por mi ignorancia en estos temas entendía bien poco. Solo se que serví de maniquí para las practicas de la chica.Me dijeron que ella me atendería el parto, y yo acepté. Al fin y al cabo si no practican...como van a aprender??.
Mi matrona desapareció minutos después, y la residente. A partir de ahí, no recuerdo la hora, si las 22.00 o antes, entro otra matrona y me dijo que para paritorio, que empezaba el expulsivo.
Ahí empezó mi pesadilla. A todo esto ni rastro de las personas que me estaban llevando el parto durante todo el día.
Recuerdo que empujaba en cada contracción, me guiaban los pujos, y me "ayudaban" (por no decir destrozaban) apoyándose en mi perineo, pero yo confiaba en que en poco tiempo acabaría todo.

La epidural, después de 5 horas ya había desaparecido, y notaba absolutamente todo, pero aun así, seguía empujando, notando como me presionaban hacia abajo para... (No se para que!) Y dándome cuenta de que la ginecóloga y la matrona cuchicheaban tapándose la boca.
Solo escuchaba "vamos a intentarlo un poco más, si no hacemos "eso""...para mí, eso era "cesárea", y no es que me desagradara la idea, después de 4 horas empujando, solo quería tener a mi niña ya.
Tras tantas horas de expulsivo y muchos intentos, la médica me dijo que mi pelvis por su forma dificultaba la salida de mi niña, y que habría que hacer un parto instrumental, que no me asustara por que iban a entrar muchas personas a valorar la situación...Yo no pude contar cuantos eran en ese momento, más tarde me enteré que 16 personas entre médicos y matronas.
Echaron a mi chico, por ser desagradable el tema de los fórceps...y a mí me cubrieron con un plástico las piernas...
Llego el anestesista, y yo solo le decía que me encontraba muy floja, y que notaba todo...me puso una mascarilla, que en principio creí que era oxigeno, pero que ahora creo que era algo de sedacción.
Mientras me preparaban, también me ponían el termómetro...y es que tenía fiebre...aunque no me lo dijeron en ese momento pero yo lo notaba.

A  continuación, mientras seguía empujando, vi a la ginecóloga con los fórceps, y ya no quise mirar.Sólo recuerdo a duras penas que me dijo "cuando te diga, empuja con todas tus fuerzas", y imagino que en el preludio a ese empujón ya cortaron e introdujeron los fórceps.
No recuerdo si grite. Mi novio dice que si, que desde fuera escucho un mega-grito. 
Ya estaba la cabeza fuera, ya dejaron entrar a mi chico, y a mi solo me decían que mirara a mi niña, que estaba naciendo, pero yo no podía mirar...la ultima imagen que tenía era a esa médica tirando de mí con unos hierros...una imagen totalmente desagradable. 
Tras otro empujón salio mi pequeña, y yo solo podía llorar. No veía nada, estaba muy ida...y no lloraba de emoción...lloraba de como se habían cargado mi momento, nuestro momento.
Tras llevársela para hacerla llorar...(no lloro mucho mi niña) me la pusieron encima, pero yo ya no tenia fuerzas...no recuerdo nada, solo que se la dieron a su papi, y que yo no tengo la primera imagen de mi hija en la memoria.

A continuación, me pregunta la ginecóloga si tengo fuerzas para expulsar la placenta, y yo le digo que si...pero mi cuerpo ya no respondía, y tuvieron que extraérmela manualmente.
Con la mala suerte, que se rompió...y para acabar la faena, tuvieron que hacerme un legrado, del que ni siquiera nos enteramos hasta no leer el informe de alta.

Salí de ese paritorio, con mi hija a mi lado en mi cama, bajo mi brazo, y yo sin fuerzas para mirarla. Salí de ese paritorio con el dolor mas intenso, más que el físico, el dolor de que me habían destrozado el momento más feliz de mi vida.

Por un momento me sentí culpable, y quise pensar que yo tuve la culpa, pero no fue así. Yo di todo lo que pude, y más de lo que pensaba que podía dar.
A día de hoy, pienso que gracias a dios (o a quien sea), todo salio bien, y muchas cosas de las cosas que pasaron en ese paritorio se quedaron ahí, no las supimos.
La niña y yo estábamos bien.

Menos mal que en dos días, dos días en ese hospital en el que me sentí inútil por no poder atender a mi hija, gracias a mi salvajada de parto, volvimos a casa, y empezar de cero.

Gracias a mi pareja, el mejor compañero, el mejor apoyo, el mejor padre desde el minuto uno, el mejor aprendiz, y la mejor persona...te quiero cariño, no se que haría y hubiese hecho sin ti...

Gracias a la familia, tanto la que estuvo como la que no estuvo en presencia pero si en memoria, gracias por el apoyo, por el cariño, y por acompañarme aunque fuese por telefono.Sobre todo a mis padres, hermano, suegros y cuñadas, os quiero!.

Gracias en especial a mi madre, por que tampoco se que hubiese echo sin ti, sin tu apoyo, y tu serenidad, y por que aunque estuviese siendo madre, me sentía muy niña, y te necesitaba conmigo. Te quiero!.

Gracias a amigos, a conocidos, a toda la gente que llamó y se preocupó...y por las circunstancias no pudimos atenderles...perdón y gracias!

Gracias a mi niña, por ser una campeona, por perdonarme que no pudiese atenderla tal y como me hubiese gustado los primeros días, por enseñarme a ser mamá, por ser tan buena y ponérmelo tan fácil, por hacerme olvidar el parto, y quedarme solo con lo bueno y por darle sentido a mi existencia.

Y lo siento, pero no puedo dar las gracias a médicos, ni enfermeras, ni matronas del Hospital 12 de Octubre de Madrid, en concreto al turno que me atendió a mí...que ni siquiera me ayudó ante mi imposibilidad a lavarme, por no explicarnos que paso, y por quedarme con cara de gilipoyas cuando un mes después nos enteramos que la niña venía con vueltas de cordón...Lo siento, pero para mi las experiencias son las referencias, y me robasteis mi parto.














3 comentarios:

abi dijo...

gracias a ti por hacerme la persona mas feliz con mi nieta , cuando una tiene un hijo sabe lo que lo representa una madre, a mi me paso, pero cuando una hija tiene un bebe y se estropea al final ese momento, como paso, deja de ser un momento feliz para robarte parte de tu vida, menos mal que viendo la carita de Alba cuando estabamos mas tranquilos, la felicidad q nos robaron hizo presencia, y lo q me preguntabas durante las horas d parto ya lo sabes: estoy orgullosa d ti, q pedazo d mujer pari yo!!!!!

Anónimo dijo...

por que sale como abi mi comentario?, a ver ahora

Oliver dijo...

Lo mejor de todo,,,,,, que esa pedazo de mujer que pariste se cruzo en mi vida, jijiijijiji